Las
primeras formaciones que indican claramente una continuación de las tendencias son las banderas y los gallardetes. Son las más fiables figuras de continuación
y rara vez marcarán un cambio en la tendencia.
Las banderas son pequeños rectángulos que
forman los precios, ligeramente inclinados en contra de la dirección de la
tendencia que les precede.
Los
gallardetes son figuras similares, salvo que las líneas convergen ligeramente,
formando una especie de cuñas pequeñas, también inclinadas en contra la
tendencia que las precede.
Las
banderas y gallardetes representan ligeras pausas en mercados sumamente
activos. Son figuras que aparecen con bastante frecuencia.
Sucede a
menudo que el mercado ha iniciado un ascenso vertical y muy fuerte, alimentado
por la total ausencia de vendedores. Si la cotización ha subido mucho y muy
rápido, lo más probable es que los inversores también quieran tener beneficios
rápidos. Aparecen intereses vendedores que frenan este ascenso, pero esta
situación va perdiendo importancia y pronto empiezan a escasear los vendedores.
En este momento el mercado ha asumido el nuevo nivel de precios en el que se
encuentran las acciones y vuelve a impulsarse hacia arriba.
Si se
observa el gráfico el paño de la bandera es la propia figura y la anterior
subida escarpada es el mástil.
Formación de bandera en el gráfico
semanal de la germana Volkswagen. Los gallardetes y banderas son formaciones
que aparecen en mitad de los recorridos, en este caso alcista, y que suelen
suceder tras periodos cortos y rápidos en los que las cotizaciones se han
incrementado de forma muy fuerte. En estos momentos, el valor se toma un
descanso de unas pocas sesiones para reanudar su camino. Para que la formación
cumpla plenamente con sus pautas, durante esas sesiones de corrección en los
precios el volumen también tiene que tener el mismo comportamiento, es decir,
debe reducirse la contratación del valor. En el caso de Volkswagen, vemos que
el valor frena su avance en la zona de máximos anteriores, en los alrededores
de los 65 euros, durante unas semanas, para finalmente, con apoyo de volumen,
alcanzar el objetivo teórico de precios en las cercanías de los 80 euros. En
este momento se completa la formación de bandera. Observamos que se ha
conseguido el objetivo de precios que equivale al mástil de la bandera. En este
caso, la subida se materializa con volumen para considerar a la figura con una
total ortodoxia. Las banderas y gallardetes son típicas en las salidas que
confirman tendencias alcistas o en las aceleraciones de las mismas, como en
este ejemplo. A veces es posible encontrar dos o tres banderas seguidas. El
autor no ha encontrado nunca en ningún gráfico cuatro formaciones seguidas, con
lo que la prudencia aconseja deshacer posiciones después de una tercera
formación. Nos adelantamos con el análisis de la formación triangular que
aparece también el gráfico y que no confundimos con la de bandera o
gallardete por la propia duración temporal de la misma.Tras alcanzar el
objetivo teórico marcado por la bandera de continuación, se mueve por encima de
los 80 euros sin lograr romper los 90 euros por un plazo de unos tres meses,
para formar una típica formación triangular. Presenta todas las putas ortodoxas
de volumen, reducción durante la formación de la misma para, finalmente, durante
el escape ya entrando en el último tercio de la figura, aumentar el volumen de
forma considerable hasta alcanzar el objetivo de la formación, que no es otro
que la amplitud de la misma. La formación se confirma en el momento que rompe
los 87,50 euros en febrero de 2007. Desde esta situación, sin embargo, nada
hacia presagiar que el valor siguiera extendiendo sus avances hasta los máximos
de los 200 euros en octubre de 2007 y ahora, tras el proceso de corrección,
esté consolidando niveles en torno a los 150 euros. (clic en imagen para ver mas grande)
Se dice que las banderas son figuras de medio
camino porque aparecen, casi siempre, en la mitad del recorrido de una
tendencia alcista o bajista. Esto ha generado una regla que permite obtener el
objetivo de precios que se puede alcanzar cuando se reanude la tendencia. La
medición se obtiene del mástil de la bandera, es decir, la distancia que han
recorrido los precios desde que se inició la tendencia hasta el principio de la
figura. Esta distancia será la que recorrerán los precios desde el punto en que
se produzca la ruptura de las líneas paralelas que forman la bandera.
Es
importante, para que la formación siga los cánones establecidos, que el volumen
vaya disminuyendo mientras se esté formando la figura. También es muy
importante que la ruptura que se efectúa al final de la formación lleve consigo
un importante volumen de contratación, como si se tratara de una explosión.
Esto es más importante si la bandera se está formando en una tendencia alcista
que no en una tendencia bajista. Aquí prevalece la norma que dice que para que
un valor suba hace falta dinero que lo empuje, pero para que caiga no hace
falta nada, cae solo.
Una bandera debe tardar como mucho tres
semanas en formarse, con un mínimo de cuatro o cinco sesiones. Con menos
tiempo, es muy difícil detectar la formación. Cualquier figura que tarde más
tiempo en formarse debe considerarse sospechosa y hay que prestarle especial atención.
En las tendencias bajistas los plazos de formación de la figura suelen ser
menores. En la mayoría de las veces, se quedan en el plazo mínimo de una
semana.
Todo lo
que se ha dicho sobre las banderas es igualmente válido para los gallardetes,
aunque se diferencian en la forma: los gallardetes son pequeñas cuñas
inclinadas y muchas veces pueden parecer triángulos simétricos.
Estas formaciones se dan en situaciones en
las que es posible obtener muy buenos beneficios si se reconocen También son especialmente frecuentes en los mercados de divisas y
de futuros.
Gráfico
de Abertis. Podemos observar la aparición de una bandera como patrón de
continuación en su tramo final, primero al alza y seguidamente otra a la baja.
Los objetivos se cumplen en muy pocas sesiones, lo que suele ser una de las
características de las banderas y gallardetes. En el gráfico vemos también el
patrón de cambio que ha dado lugar a la fuerte corrección a la baja de triple
techo, con el «pullback» incluido para tener una segunda oportunidad de escapar
a la corrección. Anticipando conceptos, nos aparece también como patrón de
vuelta, en este caso al alza, para poner fin a la corrección, la figura de un
triángulo rectángulo, que aquí presenta un objetivo menor. Banderas y
gallardetes son de las formaciones más fiables y, como vemos, figuras de medio
camino que pueden ayudar a obtener beneficios, a veces en plazos muy cortos de
tiempo. Estas estructuras aparecen de forma muy frecuente en los gráficos
intradiarios y son igualmente aprovechables por los «day-traders» (operadores
en intradía). (clic en imagen para ver grande)